Los primeros días Yahvé hizo lo de siempre, puso en el cielo el Sol, la Luna y las estrellas. Pobló la tierra con plantas y animales, e hizo que en los mares pulularan los peces y en el aire volaran las aves y los insectos con alas.
El sexto día llegaron teletransportados Adán y Eva. En diversas partes del planeta, mientras tanto, aterrrizaban las naves de la flota colonizadora.
En el séptimo día, pusieron a descansar a Dios, sus circuitos habían funcionado a la perfección. Le desconectaron la fuente de poder, lo aceitaron y lo empacaron con cuidado.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario